Hace pocos días se conoció la noticia de que el Museo de la Guerra Naval de Jutlandia (Dinamarca), halló el casco del submarino alemán U-3523 (del moderno tipo XXI) en las cercanías de Skagen.
Dicha noticia, aun de gran importancia, tal vez no debió sorprender tanto.
Hace décadas que se cree que dicha nave, comandada por el Oblt. Willi Müller, fue hundida por un bombardero británico B-24, el 6 de mayo de 1945, exactamente en el mismísimo lugar del hallazgo.
Cincuenta y ocho marinos murieron inútilmente aquel día, a horas de que se firmara el armisticio.
Por lo tanto, el hallazgo no hace más que confirmar lo que se presumía desde hace muchos años.
Sin embargo, los numerosos artículos aparecidos en la prensa mundial, dan cuenta de un supuesto misterio que finalmente ha llegado a su final, para luego abundar en tesis estrafalarias y teorías afiebradas.
¿Qué misterio? me pregunto...
Diarios de la importancia de Perfil, Clarín o Infobae, en Argentina, han levantado la noticia repitiendo los mismo comentarios sin sentido que se han publicado otros alrededor del mundo, como BBC o The Gurdian.
Sólo por dar un ejemplo, gran parte de los 118 submarinos del tipo XXI estaban en condiciones de navegación para el final de la guerra y nada de especial tenía el U-3523 sobre algunos varios otras naves similares...
Como suele suceder con los submarinos alemanes de la Segunda Guerra Mundial, suele ser abundante la desinformación y las malas interpretaciones.
Hace años escribí un largo artículo sobre los sumergibles del tipo XXI y las reales chances de que alguno de ellos haya podido cruzar el Atlántico hasta las costas sudamericanas. Ya en ese momento hacía mención al U-3523 y su posible lugar de descanso en el Skagerrak; a continuación el link:
* Fotografías del Museo de Guerra de Dinamarca